La inteligencia emocional un paradigma de la psicología actual
Las emociones forman parte de nosotros, y pese a ser necesarias y adaptativas, pueden causarnos sufrimiento. El sufrimiento viene provocado muchas veces por la valoración negativa que hacemos de éstas, pues intentar luchar contra ellas no es una decisión acertada. Es mucho más saludable entenderlas, conocerlas, saber que están ahí, pero aceptarlas como parte de nuestra existencia y nuestra experiencia, a sabiendas de que muchas veces no son como nos gustaría que fuesen.
Cuando nos enfrentamos a situaciones estresantes o amenazantes, nuestro cerebro activa una variedad de mecanismos de defensa para protegernos de daños emocionales. Uno de estos mecanismos es el retraimiento, una estrategia en la que nos alejamos o nos retiramos de las circunstancias o interacciones que consideramos difíciles de manejar. En este artículo, exploraremos el mecanismo de defensa del retraimiento, su función y cómo puede afectar nuestra salud emocional.
Definición de Retraimiento:
Respuesta a un peligro o a un estrés intenso, en el cual la persona queda en un estado de letargo, apatía, depresión y falta de comunicación, encerrándose en sí misma. Los casos graves pueden desembocar en estupor y catatonia.
Protección emocional
El retraimiento se activa como una forma de protegernos emocionalmente. Cuando nos sentimos abrumados, estresados o en situación de peligro, puede parecer más seguro retirarse y crear una barrera entre nosotros y la situación que percibimos como amenazante. Al hacerlo, buscamos preservar nuestra estabilidad emocional y evitar posibles daños psicológicos.
Autoconservación
El retraimiento también puede estar relacionado con la necesidad de preservar nuestra energía y mantenernos a salvo. Al alejarnos de situaciones estresantes o conflictivas, evitamos gastar recursos emocionales innecesarios y nos protegemos de posibles repercusiones negativas.
Impacto en la salud emocional
Si bien el retraimiento puede ofrecer una protección temporal, este puede tener un impacto de efectos negativos en nuestra salud emocional a largo plazo. Aislarse demasiado de los demás puede conducir a la soledad, la falta de apoyo social y la desconexión emocional. Estos factores pueden afectar en la autoestima, el bienestar Además, puede dificultar en la capacidad de afrontación y resolución de problemas y por ende afectar el crecimiento personal, ya que evitamos enfrentar los desafíos y las confrontaciones necesarias para nuestro desarrollo.
Equilibrio y alternativas saludables
Si bien el retraimiento puede ser una estrategia defensiva útil en determinadas situaciones, es importante encontrar un equilibrio saludable. El aislamiento prolongado puede ser perjudicial para nuestra salud mental y bienestar general. Es esencial buscar alternativas saludables, como establecer límites claros, practicar el autocuidado, buscar apoyo social adecuado y desarrollar habilidades de afrontamiento efectivas.
Acciones para mejorar el retraimiento emocional DE LARGA DATA
Comprender las emociones: Tómate un tiempo para reflexionar sobre lo que sientes y por qué reaccionas de cierta manera en algunas situaciones. Puede que estés preocupado por cómo te has comportado en el trabajo esta semana, al gritarle a un compañero, y ahora te arrepientes. Quizás el problema no era tan grave, pero simplemente se te ha ido de las manos por no pararte un momento a pensar en el verdadero problema. Igual el problema de fondo es que te sientes estresado en el trabajo porque no gestionas bien el tiempo. Una estrategia para entender tus emociones es tener un diario emocional. Para utilizarlo, solamente necesitas sentarte frente a él, 10 o 20 minutos antes de ir a la cama. Puedes hacer un repaso del día y anotar cómo te has sentido, por qué te has sentido así y qué podrías haber hecho para mejorarlo.
Practicar la meditación: La meditación es una técnica efectiva para controlar las emociones. La meditación ayuda a centrar la mente en el momento presente y reducir el impacto de pensamientos y emociones negativas.
Hacer ejercicio físico: El ejercicio físico regular puede ayudar a reducir los niveles de estrés y mejorar el estado de ánimo ya que este aumenta la producción de endorfinas, que son sustancias químicas que transmiten placer, felicidad, alegría y ayudan a reducir el dolor. Además La noradrenalina ayuda al cerebro a afrontar el estrés de manera más efectiva. Hacer ejercicio físico es una meditación activa, ya que te ayuda a olvidarte de las preocupaciones cotidianas y a concentrarte solo en los movimientos del cuerpo.
Adoptar una actitud optimista: Adoptar una actitud optimista puede ayudar a reducir los niveles de estrés y mejorar la salud mental.
Buscar ayuda profesional: Si sientes que tu retraimiento emocional está afectando tu vida diaria, considera buscar ayuda profesional. Un psicólogo o terapeuta y un Psicoterapeuta Holístico puede ayudarte a desarrollar habilidades para manejar tus emociones y mejorar tu bienestar emocional.
Investigado por: Joslid Salazar
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