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Foto del escritorJoslid Salazar Prema Sai

La falsa felicidad un patrón socialmente aceptable



Está muy de moda el ser positivo y mostrarse siempre como una persona feliz.

Puesto que hay una distorsión en cuanto a como me siento debido a la no aceptación de las emociones propias, a su vez y por lo general rechazadas por la sociedad, las emociones mal llamadas negativas como tristeza, melancolía, incluso ira. Surge un patrón dónde la persona que lo muestra es de una vez etiquetada como débil, inferior, tóxica... La sociedad (círculo de amistades) llegan aislar a la persona que lo muestra como mecanismo de defensa, piensan "Debo alejarla porque me va a afectar con su emoción y yo estoy muy bien". Son algunas de la excusas que he escuchado.

Entonces, esto ha creado una máscara social superficial de falsa felicidad. Que solo una persona lo suficientemente perceptiva e incluso con lazos afectivos puede notar la diferencia.

En un fuerte y claro valor a la supervivencia de mantenerse incluído en el grupo social se idea esta forma muy clara de una máscara de la felicidad. La cual amerita una fuerte energía para sostenerla. Empeorando así lo que le está ocurriendo internamente. Porque o me encargo de demostrar ser muy feliz o me reviso y le hago frente a mi emoción interna. Hasta que por un descuido está máscara se cae. Recalcó toda máscara está propensa a derrumbarse. Ahora quienes realmente se mantienen a su lado en esos momentos de desnudes emocional son a quienes realmente le importa como persona.

No hace falta el que se va... Cierto.

En un enfoque hacía lo actual y las nuevas tecnologías con el auge de las redes sociales, se es mucho más fácil crear está máscara social de falsa felicidad y demostrar perennemente alegría eterna de una forma sistemática porque es lo socialmente correcto y aceptado. Causando en quienes lo observan una especie de admiración superflua, piensan si tan solo fuese mi vida como la de fulanito... Pero si supieras que fulanito tiene lo mismo que tú con algunas variantes desde una familia hostil, o un matrimonio en el piso, deudas, niños malcriados, problemas en el trabajo, de salud, incluso cansancio y agotamiento físico mental o emocional. Hay formas de decir lo que se siente sin señalar y buscar culpables. Hay publicaciones, memes, frases desde la risa o el sarcasmo muy emocionales que muy bien se puede adoptar a como me siento en determinado momento sin necesidad de ventilar la vida personal.

¿Que hay de malo en mostrar las emociones y ser quién realmente somos en el momento en el que me encuentro justo ahora?. ¿Para que esforzarse por caerle bien a personas que no les interesas? ¿Que ganas con mostrar lo que no se és?

Lo verdaderamente importante es ser honesto contigo mismo. Ya es momento de tener una vida sin máscaras sociales. Joslid Salazar

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