Principalmente quiero aclarar que es normal temerle a esas zonas desconocidas de nosotros, y aunque desde nuestra percepción se muestre como una monstruosidad... no es así del todo. Si hay trabajo interior activo, y lo tomas con disciplina te darás cuenta por ti mismo. Partiendo desde la premisa de no etiquetas y no prejuicio podremos avanzar cuando observarnos se hace prioritario.
Nota: Utilizaré palabras para el entendimiento de la mente donde todo tiene un nombre, lo cuál este artículo va dirigido a aquellos que están comenzando a auto observarse...
Esto no es algo fijo en la psique... Pues ella va modificando conforme nosotros vamos avanzando en el conocimiento de sí mismos.
De ese modo:
Hay emociones negativas (SOMBRA) que viven en nuestro interior como monstruos que nos acechan y salen a la luz en el momento más inoportuno (cuando estás distraído), como la culpa, el miedo, la soberbia, el egoísmo, la envidia, los celos…
A veces, resulta complicado superar un sentimiento de culpa por algo que hemos hecho, o es inevitable sentir miedo ante una situación que nos preocupa. Lo mejor en esos casos es escucharte observarte no intentar callarte. Toma nota de lo que piensas y sientes.
La mejor forma de dejar las emociones negativas es abandonando el habito de alimentarlas... ¿Cuándo las alimentas? cuando rumeas con ella todo el día. También haciéndote responsable por ellas cuando no tienes la completa responsabilidad y sintiendo lástima hacia ti mismo. Toda emoción negativa fija en la idea del problema, no resuelve el problema, solo lo potencia.
Recuerda que cuando te haces consciente de lo que realmente temes o te enoja, etc... es cuando más vulnerable te vuelves. Pero dentro de esa vulnerabilidad también se muestran tus fortalezas, porque averiguas qué es lo que realmente quieres. Pon atención a lo que sí importa.
Es hora de mirar a tus monstruos internos a los ojos. Hablándole directamente a esa emoción raíz que le dio vida por muy doloroso que sea.
Cuando ya estés lo suficientemente diestro observándote notarás la fragmentación en tu psique y sus diferentes voces y donde la emoción asume una mascara que pudiéramos llamar una personalidad a parte sin que llegue a ser una patología. OjO con esto.
Cuando eso lo notes es el momento de iniciar el proceso de integración lo cual puede ser muy demorado, pues primero debes de reconocerlo, analizarlo ver como piensa en que momentos salta y se revela frente a tus ojos y la de otros, ¿Cuándo estas contigo mismo, que te dice?, ¿Qué te hace sentir? HASTA SABER COMO SURGIO, que eventos hicieron que se creara... Hasta que no llegues a ese punto no serás capaz de comprender que es un mecanismo de defensa de tu psique. Joslid Salazar (Prema Sai)
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Modificación: 27/10/2022
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